Auténtico carácter del Berguedà
La vanguardia gastronómica con esencia del Berguedà
En Berga, al pie de las sierras que tan bien definen el carácter del Berguedà, hay un restaurante que habla un lenguaje culto y emocionado: el de la tierra de donde venimos. Se llama Terra, y el nombre no es casual. Evoca las raíces, la memoria y el compromiso con un paisaje que su chef, Pere Venturós, conoce desde pequeño.
Restaurante Terra, el gusto de volver a casa
El local donde hoy se alza Terra había sido, durante años, la casa del prestigioso restaurante Sala, un referente para los amantes de la buena cocina de interior. Después de un período de silencio, en septiembre de 2017 el relevo tomó forma con un proyecto nuevo que quería renovar sin borrar: mantener viva la esencia del territorio, pero reinterpretada con ojos contemporáneos. Terra no es un homenaje nostálgico, sino una declaración de intenciones: cocinar desde la memoria para mirar hacia el futuro.
Pere Venturós, hijo de Berga, se marchó joven para formarse en grandes cocinas de París, como el Plaza Athénée o Le Meurice, bajo la influencia del maestro Alain Ducasse. Allí aprendió la precisión, la paciencia y el respeto absoluto por el producto. Pero, como tantos cocineros de su generación, sintió la llamada de casa. Volver al Berguedà fue más que un gesto: fue una manera de cerrar el círculo, de poner en práctica todo lo aprendido con la materia prima que le era más próxima. A su lado, Mònica Saña dirige la sala con sensibilidad y elegancia, haciendo que cada comida sea una experiencia pausada y llena de sentido.
Una cocina con alma berguedana
La propuesta gastronómica de Terra no se puede entender sin hablar de proximidad y temporada. Los productos llegan a menudo directamente de payeses y productores de la comarca: verduras de la huerta, ternera del Berguedà, trufas, setas, espardenyes o fruta de temporada.
La cocina de Venturós se alimenta de esta verdad del territorio, pero la expresa con técnicas finas y una estética contemporánea. Es una cocina que no busca sorprender con artificios, sino emocionar desde la pureza del gusto. El resultado es un equilibrio muy bien encontrado entre tradición e innovación, entre la fuerza de la memoria y la sutileza del detalle.
En los menús —que varían según la época del año— se pueden degustar platos tan expresivos como el huevo de gallinas felices con trufa de verano y patata, el tártar de ternera del Berguedà como un canelón, o un magnífico arroz cremoso de «espardenyes» y gamba con caldo de cigala. También tienen un protagonismo especial los platos de caza y los guisos suaves, cocinados con una mirada moderna pero fiel al recetario tradicional.
Para acabar, los postres ofrecen un contrapunto ligero y fresco, a menudo con frutas locales —como el melocotón de viña con piñones tostados y vainilla de Madagascar— o reinterpretaciones de clásicos como la «torradeta emborratxada«.
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web : Restaurant Terra de Berga
Instagram : instagram.com/terra_restaurant
Pere Venturós: “Cocinar es volver a casa, cada día.”
Los menús del restaurante se adaptan a diferentes formatos: un menú Tradición más asequible entre semana, un menú Huerto centrado en el producto vegetal, y el menú Terra, completo y sugerente, pensado para descubrir el universo completo del chef. Los precios oscilan entre los 35 y 95 euros, según la opción elegida.
El espacio acompaña esta filosofía: líneas limpias, tonos naturales, una luz cálida que invita a la conversación y al tiempo lento. No hay prisa en Terra, como tampoco la hay en las montañas del Catllaràs que se dibujan en el horizonte. Aquí, cada plato es una pausa y una mirada al paisaje.
En un momento en que la palabra “territorio” a menudo se utiliza como reclamo, el restaurante Terra es un ejemplo auténtico. No es solo un lugar donde comer bien, sino un espacio donde se degusta la identidad de un país pequeño pero inmenso en sabores.
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